1 de junio de 2009

Manuscrito Voynich - Protohistoria Subterránea

Manuscrito Voynich
Protohistoria Subterránea
Débora Goldstern




Hoy Crónica Subterránea se sumerge en los secretos ocultos del famoso Manuscrito Voynich. Ante tanta avalancha de información, ya que quizás sea uno de los temas de misterios más requeridos por los internautas, parece innecesario ahondar en su historia, porque a estas alturas, que podemos enunciar o decir sobre lo ya sabido, o agregar novedades a un tema que desde el pasado siglo XX cuando salió a la luz, originó una competencia feroz entre especialistas que buscan descifrarlo, aún a costa de sus propias carreras profesionales, muchas de las cuales se han visto empañadas.

Sin embargo más allá de estos avatares naturales, desde este blog no queríamos quedar al margen, y decidimos entregar nuestra opinión sobre el Manuscrito, del cual esta investigadora se interiorizó hace casi veinte años.

Fue a través de Jacques Bergier, con su imponderable Libros Condenados, que obtuve el primer el primer pantallazo. Valga decir que muchas de la información luego conocida, salió del capítulo incluído en su libro, siendo una de las fuentes más citadas, por lo menos en español, a la hora de referirse a la historia del enigmático tratado.

Allí el sagasz francés brindaba detalles reveladores, y se inclinaba por la tesis conspiracionista a la hora de catalogarlo. Centrándose en la figura de Wiiliam Newbold, uno de los estudiosos más importante a la hora de intentar el desciframiento de Voynich, Bergier alerta sobre las presiones por éste sufrida cuando en los años 20' comenzó a declarar en públicos sus hallazgos, ya que recibió feroces amenazas, para terminar desacreditado, años después, alerta más que atendible a quién ose profundizar demasiado en el manuscrito. El caso Newbold guarda paralelismos inquietantes con Helena Petrovna Blavatsky, que una vez revelada las Stanzas de Dzyan, fue objeto de una feroz persecusión que también la llevó a la ruina. Esto última también lo señala Bergier, y es otro dato para atender. También con buen tino el investigador galo agrega, que si el manuscrito logró sobrevivir, fue porque cuando salió a la superficie era la época de la fotografía, lo cual jugó a su favor.

No obstante Bergier escribe que: "tengo buenas razones para creer que se destruyó una versión lenguaje normal. En efecto, Roger Bacon tenía en su poder un documento, que según él, había pertenecido al Rey Salomón, y que contenía las claves de los grandes misterios. Este libro, compuesto de rollos de pergamino, fue quemado en 1350 por orden del Papa Inocencio VI. Este se justificó diciendo que el documento contenía un método para invocar a los demonios. Si sustituímos demonio por ángel, y ángel por extraterrestre, podremos comprender muy bien los motivos de ésta destrucción".

Y desde Crónica apoyamos esta visión, como así creemos que el Manuscrito tiene un lazo con el mundo subterráneo, del cual quizás tuvo su origen. Elegimos para ilustrar este pensamiento algunos párrafos extraídos de El Manuscrito Voynich y la búsqueda de de los mundos subyacentes, del escritor uruguayo Mario M. Pérez -Ruíz, quién sostiene como tesis, que quizás el gran esoterista hispano Ramón Llull, fuera uno de los responsables del fantástico documento. Nuevamente el ocultismo, tiene la palabra.


Los secretos de los mundos olvidados y subyacentes




John Dee tenía como gran obsesión coleccionar libros raros con el fin de experimentar sus artes mágicas, de las cuales era un avezado y competente sabedor. En general eran papiros, y no podemos saber de dónde los sacaba ni cuáles eran sus contactos. Por otro lado, John Dudley, duque de Northumberland y comtemporáneo de Enrique VIII, se apropió de todos los libros relacionados con la brujería. Realizó requisas en todos los monasterios, hasta que halló en una abadía del condado de Essex el documento que nos ocupa. El prólogo escrito por Roger Bacon decía: «Ésta es copia fiel del original que se encuentra guardado bajo las montañas que corren sobre la costa oeste de un lejano lugar, situado en el extremo sur del planeta».

Tengamos en cuenta que Roger Bacon nace en 1214 y muere en 1294; aún no había sido descubierta América, y la cadena a la que se hace mención son los Andes en las cercanías de la Tierra del Fuego.

En una imagen del libro encontraremos la esfera simbolizada por tres ruedas, como el carro de Ezequiel, y en ellas movilidad e inmovilidad central permanentemente vigiladas por doce guardianes (signos zodiacales), y todo bajo el influjo del «otro» Sol, invisible y paralelo al sistema solar (según la tesis de los antiguos rosacruces).

En una imagen dentro de la rueda hay otra rueda cósmica, a su vez en el interior de una estrella de doce puntas; allí aparecen otras estrellas y palabras de carácter ritual, intercaladas en vectores, y también lo que podrían ser una luna o un sol no determinados. ¿Se trata del astro que rige los cielos de un mundo subterráneo, donde el sol y la Luna se conjugan? o, por lógica, si brillan tintineantes estrellas de siete puntas, ¿éstas son los siete metales con sus formas de cúpula cerrada adaptándose, como en la evolución, al entorno, y adquiriendo lo que le es mas propicio en cada momento con el fin de sobrevivir? El ADN es la molécula que encierra toda la información y provoca la multiplicación genética que llamamos vida humana, que siempre es sinónimo de evolución. (Especies similares a la humana se han extinguido, no así el alma de las cosas).

Raznes, en busca de los elixires y de una transformación superior de la que estaba seguro intuyó y escribió, poco antes de su fallecimiento: Esta débil forma que se deteriora día a día me advierte que pronto vaya fallecer.

¡Ay! no sé hacia donde se encaminará mi alma marchita cuando abandone esta arcilla gastada y yena.
El Sol y la Luna, como el círculo o la copulación, marcan los ciclos cósmicos de la ida y el retorno, de la vida y la muerte. El sol interior es un astro del desasosiego, misterioso andrógino con la voz vibrante: un embrión de oro.

En ocasiones se han considerado los diagramas como mapas de un mundo desconocido, subterráneo o paralelo, poblado por larvas protohumanas. De aquí lo que sigue a continuación. La repetición de figuras como en los mantras crea efectos mágicos

En su Arbor Scientiae (Árbol de Ciencia), Ramon Llull aprovechó concepciones sufíes, hebreas y mágicas, pues para hallar la iluminación el ocultismo le llevaría al conocimiento «que había de exceder a todos los que habitualmente pueden tenerse».

Salomón, el gran mago



Investigar sobre este inquietante manuscrito es horadar en un texto prohibido, casi completo, que se salvó de las llamas por no ser entendido. Es un texto de magia, inspirado o íntimamente relacionado con el rey de los brujos: Salomón. En él hay ciertos secretos plasmados por revelación, o que procedían de una civi­lización superior, de origen extraterrestre o angelical.

En el ascenso y descenso del intelecto, la inteligencia nos pondrá en el camino de la revelación, espiral iniciático. Según in­terpretación de Roger Bacon, el documento Salomón, como se conocía la versión hebrea del documento Voynich, será pasto de las llamas del Santo Oficio. ¿O fue ocultado? La reconquista de los Santos Lugares pudo ser una excusa para hallar lo que se es­conde en el Templo de Salomón. Antes de la oscilación del eje de la Tierra que provoca los diluvios cada 12.960 años (el último tuvo lugar 10.500 años a.C.) el eje del planeta pasaba por Jerusalen, (como ahora lo hace por los polos), pero cualquier espa­cio en la Tierra da lugar a la creación de un eje, según la fuerza de nuestro espíritu y de acuerdo a los rituales adecuados.

El Templo debía ser erigido en la cima del monte Moriá, en el sitio donde Dios pide a Abraham el sacrificio de su hijo Isaac (algunos dicen que no debemos confundirlo con otro lugar). Abraham no rehusó hacer correr la sangre de su hijo único, aunque en el último instante el patriarca oirá el llanto de un animal indefenso, un carnero enredado en unos arbustos, y sustituirá a su vástago por e! cordero. Como reza el texto: «La presencia proveerá y será vista».

Isaac Newton realizará una importante investigación. Según él, el Templo será construido en tres ocasiones. Keynes lo llamaba «e! último de los brujos» ¿Por qué le llamó brujo? Pues bien, «porque contemplaba el Universo y todo lo que en él se contiene como un enigma, como un secreto que podía leerse aplicando el pensamiento puro a evidencias, a indicios místicos que Dios había diseminado por e! mundo, para permitir a la hermandad esotérica la búsqueda del tesoro filosófico..

El filósofo-físico creía que algunos secretos eran transmitidos por los miembros de una hermandad en una cadena invisible que comienza extendiéndose desde Babilonia hasta nuestros días, además consideraba al Universo y la Naturaleza como un libro, un criptograma o un enigma geométrico reflejado en un espejo, y por lo tanto tendría su teorema explicativo.

Newton escribirá con su habitual timidez: «No sé lo que pareceré a los ojos del mundo, pero a los míos es como si hubiese sido un muchacho que juega en la orilla del mar y se divierte encontrando un guijarro más pulido o una concha más hermosa, mientras e! inmenso océano de la verdad se extiende inexplorado frente a mí». Pero las verdades, desde la antigüedad pitagórica, tenían en palabras de Descartes una expresión matemática, y lo invisible se hacía presente por medio de la ciencia y la mística. «Que no entre nadie aquí que no sepa geometría», dirán en e! templo egipcio de Sais, en e! templo de Delfos, en la República de Platón, y los cabalistas hebreos, los alquimistas, los constructores de catedrales harán suya esta propuesta filosófica.
La Biblia es un libro cabalístico, y Newton sabía que el contenido secreto de las Sagradas Escrituras sólo se podía entender estudiando e! mundo y el conocimiento de los antiguos.

Hasta ahora se han realizado varios intentos, pues e! criptograma bíblico sólo se puede precisar por medio de la simbología, e! mito y la filosofía natural, combinando estos métodos con el arte de! número y con otros medios hasta hoy desconocidos. La alquimia será el eje central de todos los estudios newtonianos. El 70 por ciento de los libros de su biblioteca eran de ocultismo, espiritualidad y alquimia, y los textos científicos formaban un anillo de Moebius, un ir y venir de las matemáticas, la física y de la misma teología llevada hacia la magia, la filosofía y la comprensión de la palabra, más allá de la gramática. Muchos de sus escritos alquímicos han desaparecido, y otros fueron comprados por e! Instituto de Investigación de Massachusetts. En su lápida semidestruida se encontraban, al parecer, la famosa escuadra y e! compás, junto a la serpiente, la vara de Hermes ... y la palabra «alquimista». Toda una simbología que le relaciona con una hermandad secreta. Newton tuvo el aval de uno de los fundadores de la masonería especulativa en 1717, Desaguilliers, el maestro masón.

Para Newton, los doce dioses eran nuestros antepasados. Abraham, Moisés, Salomón, Noé ... dioses y reyes que no habrían muerto jamás, manteniéndose en otra esfera dimensional. Según la cosmogonía pitagórica de la trasmigración, las almas toman cuerpo a partir de la esfera lunar y las superiores habitan en el templo de la inmortalidad. Así, los profetas que conseguían un estado evolutivo superior al humano, se reencarnarían en otro mundo como semidioses ..

Newton escribirá El Templo de Salomón, intentando hallar secretos teoremas en sus formas geométricas, el registro del sentir del todopoderoso que mostraba lo inescrutable en unas medidas determinadas; allí aparece el famoso fuego perpetuo que jamás se apagaba, el Arca de la Alianza, con los secretos divinos, las tablas entregadas a Moisés, o la Sala Áurea con el famoso 1,618 que rige y controla el cosmos, la naturaleza, el cuerpo humano; o el crecimiento de las caracolas: «Construyeron sepulcros en forma de templos, instalaron las imágenes en los templos y las adoraron como habitadas por las almas de los reyes muertos». De modo análogo se refería a este mundo, este universo, como la más deslumbrante construcción invisible. La naturaleza está, en su conjunto, sometida a unas formas matemáticas y geométricas conocidas como invariables, aquí y en otras dimensiones; entre estas hallamos el valor diferencial, la teoría o ley de la gravedad universal, el teorema de Pitágoras, la teoría de la relatividad de Einstein.

Dice en el Zohar, escrito por Moisés de León: «Dios creó el universo para ver su rostro reflejado en un espejo», pero, como todo lo visible o invisible, se puede ver sin subjetividad a través de las matemáticas.

En el mismo texto recoge Moisés de León el conocimiento de los cinco libros perdidos del profeta Moisés, de Abraham el Judío y otros, también hace suya la perspectiva del etíope Libro de Enoc y su visión de la imagen del templo de la Inmortalidad: «y entré y me acerqué a una pared que estaba hecha de cristales y rodeada de lenguas de fuego, y empezó a causarme temor. Y entré en las lenguas de fuego y me acerqué a una gran casa que estaba hecha de cristales; y las paredes de la gran casa eran como un mosaico moviente de cristal y su suelo era de cristal. Su techo era como el camino de las estrellas y del relámpago, y entre ellos había querubines de fuego y su cielo poseía la claridad y la textura del agua». Se retiene al cenit y el nadir de agua estelar donde refulgían en derredor fulgurantes las estrellas. Nos habla del cristal orgánico, mezcla de material inorgánico y celular, maleable y contorneándose a su entrada, el corazón latiendo, un vitral cambiante en el pecho del príncipe del universo interior.

Los dos mundos

Según el cabalista Ezra de Cirona, los senderos de la sabidu­ría tienen seiscientos trece preceptos, en las palabras y versos de Salomón, en cuyo «Cantar de los cantares», se dice: «El aroma de tus vestidos es como el perfume del Líbano». El perfume cons­tituye la prenda de la subsistencia de los dos mundos y de la vida de las almas, el mundo superior de los Sepiroth y el mundo infe­rior o realidad creada. Los ángeles celestiales segregan aromas de rosas y de rocío sobre sus pétalos y las fuerzas invisibles infernales expelen azufre.

Tengo la impresión de que el manuscrito Voynich es el relato de un mundo paralelo, con un idioma desconocido, enoquiano angelical o extraterrestre, que al parecer nos recrea una realidad distinta, donde se conjugan un jardín, una caverna, un mapa de las constelaciones, un bestiario de plantas antropomorfas con ojos y cuerpos de mórbida desnudez junto a conjuros de magia y, al parecer, de ciencia.

En el Zohar se escribe: «Este rocío es el maná del que se alimentan las almas de los justos. Los llamados tienen sed y lo re­cogen a manos llenas en los campos del cielo». La Tierra en ben­decida por el rocío y más tarde el gallo canta al Sol que aparece por Oriente. Tras el líquido espermático de los ángeles aparece el astro rey del sistema solar hecho de oro y pone en retirada el caos de la ignorancia, la noche.

Roger Bacon


Este franciscano, alquimista y gran erudito nacido en el año 1211, propone el estudio de la física y las matemáticas, que se aplicarán a lo que nacerá con el nombre de ciencia experimental. Este visionario escritor de ciencia-ficción, que fue perseguido y que estuvo varias veces preso por ideas que no se adaptaban a la época, nos hablará en su libro Opus Majus de enormes explosiones, de barcos que navegarán con la velocidad de la flechas, sin remos ni velas. Describirá aviones y submarinos y será conocido como el doctor Admirable, seguro de crear el elixir de la vida: «En las entrañas de la tierra el oro natural se presenta con veinticuatro grados de per­fección, pero mediante el arte se puede multiplicar hasta el infi­nito ... »

La piedra filosofal era para él el más preciado tesoro; así, Bacon, en una cita recogida por una selección de textos reco­pilados por Victor Zalbidea y otros en Alquimia y Ocultismo señala que: «Las partes untuosas minerales de la Tierra son co­cidas y reunidas en las venas de la Tierra y corren a través de la montaña, engendrando el azufre». Como puede observarse, en los filones de las minas, el azufre nacido de las partes untuosas de la Tierra encuentra el mercurio y conforma la materia de la pie­dra.
El autor sigue describiendo: « ... Cuece hasta que aparezca un niño verde, es el alma de la piedra». Otro dijo: «sabed que es el alma lo que domina durante el verdor». Por fin, aparece el rey, co­ronado con la diadema roja: embajador en tierras de Asia, a quién tártaros y chinos enseñaran fórmulas para no envejecer. Hay que saber extraer la esencia ... Más allá de los desiertos de Gobi, co­noció una tierra donde los seres humanos no envejecen.»

Roger Bacon poseerá el manuscrito, y concebirá el legado como una entidad en la piedra, distinta de ángel o demonio.

Roger Bacon escribirá en uno de sus márgenes: «He visto en un espejo cóncavo una estrella en forma de caracol; se encontra­ba entre el ombligo de Pegaso, el busto de Andrómeda y la cabe­za de Casiopea». Como apuntará Jacques Bergier: «Es precisa­mente allí donde se descubrió la nebulosa de Andrómeda».

Años después, Adolph Cyrus Roidingercht, en el año 1916, dice poder traducir el manuscrito, pues uno de sus antepasados convi­vió con el doctor Bacon, y éste le regaló un código para traducir los textos escritos por los habitantes antediluvianos protohistóri­cos del sur del planeta.

Un modelo a escala del Concorde

A.C. Roidingercht comienza a trabajar con su código secreto. Descubrirá que éste habla de una civilización desaparecida, cuyos integrantes eran seres de no más de metro y medio, que controlaban la fuerza de la gravedad y que, con una máquina llamada Nilotrona, excavaban la roca y construían pasajes y túneles subterráneos que comunicaban todo el planeta. En uno de los mapas de Voynich aparece la cartografía de un sector celeste del Cosmos no conocido hasta el momento. Las páginas aparecen coloreadas en cuatro colores diferenciados como el aura humana. El 22 de enero de 1917, nuestro científico desaparecía misteriosamente, sin dejar rastro. Pudo desaparecer de forma precipitada o ser secuestrado, ¿tal vez abducido? Su pipa aún estaba encendida sobre el cenicero. El manuscrito fue hallado abierto en unas páginas donde se podían observar los planos de una turbina para un avión a reacción y, al lado de este dibujo, en la misma hoja, un avión muy similar al Concorde
Williant Newbold y la conspiración
En 1919, el decano de la Universidad de Pensilvania, W. Newbo1d, pone manos a la obra para descifrar el documento. En 1921 su tarea comienza a dar frutos, anuncia charlas sobre el particular, pero algo le impide dar estas conferencias. Newbold recibe amenazas escalofriantes. Falleció cinco años más tarde, llevándose el enigma a la tumba. El criptograma quedaba como lo dejó R. Bacon, pendiente de resolución. Se habla de «conspiraciones contra el conocimiento oculto».

Hay muchos intereses para hacer escarnio de una civilización con una tecnología avanzada que habitó la Tierra hace miles de años. O tal vez todo sea la travesía de un alquimista hacia mundos desconocidos. No obstante, las dos teorías no se contradicen.

Debemos, por otra parte, agregar que en el libro existen aná­lisis botánicos y estelares que solo pudieron ser realizados por me­dio de moderno instrumental como microscopios y telescopios.

William Romaine Newbold especialista en historia y filosofía medievales, lingüista y criptógrafo, trabajaba en la Universidad de Pensilvania. En 1919 comienza a descifrar el manuscrito, afirma que Roger Bacón es el autor, que existe un texto minúsculo y que Bacón es el inventor de la lupa y el telescopio, instrumentos ne­cesarios para ver las estrellas y los espermatozoides. Asímismo, re­aliza seis traducciones al inglés, descubre que en algunas páginas se analizan las células de las trompas de Falopio, los bronquios que facilitan el paso de las mucosidades, y los ovulas, reflejándo­los en un aumento de setenta y cinco veces su tamaño. Más tar­de, otro científico, John Manly, contradecirá sus teorías en un artículo publicado en el año 1931 en la revista Speculum Me­diate un meticuloso trabajo despojaba de autenticidad el trabajo de su profesor, que junto a otros como Roland Crup Kent o Leo Levitov seguían órdenes precisas de los servicios secretos nortea­mericanos, del M 18, Y más tarde de la CIA. La División de Inte­ligencia Militar de los Estados Unidos, sección criptología, esta­ba encabezada por Herbert Osborne Yardley.


Notas:

Según Fabio Zerpa en Los Hombres de Negro y los Ovnis en el documento protohistórico Voynich estaría contenido lo siguiente: "posee el ser humano una energía muy especial que se gesta en la parte superior del cerebro y su medida es la del "volucielo". Esta es la tercera organización cerebral independiente, cuya sede se encuentra en la columna vertebral. Cada zona intervértebra tien relación paticular con el conocimiento acequible al ser humano y actúa a modo de archivo o depósito. Las zonas intervértebras están relacionadas íntimammente con el "conjunto sonomedular", que tiene al igual que el volucielo su centro de actividad en la parte superior de la cabeza". Para Zerpa "sonomedular" significaría el mecanismo que nos pone en contacto con nuestra identidad divina.


9 comentarios:

  1. De nuevo, saludos.

    Qué extraño, Débora, que una entrada tan importante como ésta del Manuscrito Voynich, que subiste al blog hace ya más de un año, no haya registrado hasta hoy comentario alguno. ¿No te parece curioso también a ti?

    Quiero felicitarte por el trabajo realizado, por los textos de referencia, así como por los vídeos del programa Cuarto Milenio, de mi paisano Iker Jiménez. Es en base a ellos que voy a hacer algunas reflexiones en voz alta, a ver qué te parecen.

    Antes que nada, indicar que me parece muy sospechoso que falten justamente los dos cuadernillos (16 y 18) que, supuestamente, contienen las claves de la codificación. Y, al respecto, ¿se sabe con certeza que ése es el contenido real de dichos cuadernillos o estamos sólo ante una mera hipótesis? ¿Está reseñado en alguna parte del Manuscrito que en ellos se contenían esas claves? Si fuera cierta la teoría de que fue vendido al emperador Rodolfo II, éste habría mandado de inmediato dedodificarlo, pues no habría aceptado pagar una cantidad tan alta por un texto indescifrable. En fin, es obvio que el tema está envuelto en una nebulosa. Pudiera especularse que, o bien nunca han existido esos cuadernillos, o alguien que sí los tuvo entre sus manos decodificó secretamente el manuscrito. Llama la atención que ahora se encuentre en Yale y que haya sido analizado por la NASA y la NSA, organismos ambos vinculados a la inteligencia militar norteamericana y que jamás darán a conocer ninguna verdad oculta que no convenga a quienes gobiernan este mundo. Por ello, si la NSA, entidad dedicada a romper códigos indescifrables, dice que no ha conseguido descifrar todavía el manuscrito, podemos tener de ello la misma certeza que si nos lo jurara un demente, es decir, ninguna.

    También es muy significativo que este manuscrito cumpla esa, hasta hoy desconocida para mí, ley de Zipf, según la cual un pequeño número de palabras son utilizadas con mucha frecuencia, mientras que un gran número de palabras son poco empleadas. Dado que esta ley fue postulada en el siglo XX y el manuscrito Voynich es muy anterior, se puede inferir que difícilmente estamos ante un fraude medieval, pues quien lo redactó lo hizo siguiendo una ley entonces desconocida que acota con claridad los textos redactados correctamente. El hecho de que se empleara el alfabeto romano u occidental hace realmente difícil que se trate de una lengua desconocida, pues todas las lenguas occidentales están perfectamente identificadas. Parece, pues, que se empleó dicho alfabeto para transmitir información codificada. Incido que, por la información que tengo, los sistemas de rotura de códigos de hoy en día son muy sofisticados; se decodifican textos realmente insólitos y muy rebuscados, y la informática ha sido una ayuda impagable en este cometido. Por ello, nada me extrañaría que "alguien" ya supiera el contenido del manuscrito. Ya sabes que Estados Unidos y El Vaticano albergan escritos que podrían cambiar drásticamente el rumbo de la Humanidad, pero eso no interesa.

    Para terminar, es impactante cuando afirmas, refiriéndote al Manuscrito Voynich:

    "El prólogo escrito por Roger Bacon decía: «Ésta es copia fiel del original que se encuentra guardado bajo las montañas que corren sobre la costa oeste de un lejano lugar, situado en el extremo sur del planeta».
    Tengamos en cuenta que Roger Bacon nace en 1214 y muere en 1294; aún no había sido descubierta América, y la cadena a la que se hace mención son los Andes en las cercanías de la Tierra del Fuego."

    ¿Por qué haría Bacon esta afirmación?¿Quién depositó en los Andes un texto escrito en alfabeto romano varios siglos antes de la llegada de Colón? ¿Dónde se encuentra, pues, el original? También dices, Débora, que la postura de Crónica es que se trata de un texto para la invocación de extraterrestres y que quizás tuvo su origen en el mundo subterráneo. ¿Puedes explicar más claramente esto, por favor?

    Disculpa, la extensión.

    Un abrazo
    John.

    ResponderEliminar
  2. Hola John:


    Voy a disentir de aquellos que alegan fraude en el texto, al contrario creo estamos ante un manuscrito que si bien tiene orígenes espúreos, y como bien dices un tanto vagos, si cuenta con un alto porcentaje de legalidad.

    Te cuento que en lo personal estoy muy avanzada en el estudio del manuscrito, y tengo una pista importante que desde hace un tiempo vengo elaborando.

    Lamentablemente por ahora debo guardar silencio, pero si puedo adelantar que una de las claves se vincula con "tecnología desaparecida en sudamérica", relacionada a su vez con una orden religiosa, que por el momento identificaré como "X". A lo cual hay que agregar el misterioso mundo subterráneo ...

    En algún momento prometo hacer público estos avances, y entonces veremos que nada es como parece en esta parte del continente ...

    Un gran abrazo
    Debbie

    ResponderEliminar
  3. Efectivamente, Débora, ni yo ni los investigadores del vídeo de Iker defendemos la posibilidad de fraude. Al contrario, ellos se hacen eco de esa teoría para rebatirla. Como yo. Así lo entendiste, ¿verdad?

    Y tomo nota de las muy interesantes pistas que dejas: tecnología desaparecida en Sudamérica en relación con la orden religiosa X, todo ello relacionado con el mundo subterráneo.

    Por cierto, como dices que llevas tiempo estudiando el manuscrito, se me ocurre preguntar si hay copias disponibles para quien lo desee.

    Un abrazo.
    John

    ResponderEliminar
  4. Se me olvidó. No me comentaste tus impresiones sobre el hecho de que el manuscrito se encuentre en manos norteamericanas y sobre la posibilidad, apuntada por mí, de que haya sido decodificado en secreto.

    Saludos
    John.

    ResponderEliminar
  5. Hola John:

    Si te comprendí perfectamente, solamente estoy profundizando mi opinión.

    Mis estudios más que enfocarse en el manuscrito en sí, se centran en el entorno, porque para ser honestos el cifrado del texto solo puede comprenderlo un verdadero iniciado, y como sabemos no abundan.

    El gran problema es que en estos últimos años el interés de muchos investigadores estuvo enfocado en tratar de hacer luz en el texto, lo cual no me parece mal, pero me remito a la línea anterior, sin iniciación previa es solo letra muerta, es como tratar de descifrar el senzar del cual hacía mención Blavatsky ...

    Claro que si se cambia el paradigma, y corremos el foco de atención podremos avanzar, ya que su enigma tiene que ver con esta tecnología de la cual en algunas ocasiones se hizo mención en este blog. Partiendo de ahí podemos ir avanzando.

    A su vez debemos afilar aún más las antenas en los detalles que "a veces se pasan por alto", algo que como investigadora de estos misterios conozco bien. No quedarse en la superficie, ir más allá. Esa es siempre mi meta en cuanto a mis estudios.

    Y es así que siguiendo esta línea de razonamiento, pude pentrar un poco en el enigma del manuscrito.

    En cuanto a las copias, la Universidad de Yale, liberó hace rato al mismo para estudiarlo, no existe más copia que esa, pero como te digo, el texto no el centro de mi interés, aunque si contiene algunas pistas.

    Un abrazo
    Debbie

    ResponderEliminar
  6. Te respondo a un comentario anterior.

    Voy a entrar en la repregunta.

    ¿Si supuestamente el manuscrito está decodificado, porque la Nasa recientemente pidió ayuda para clarificar algunos pasajes?

    Con esto no quiero desterrar la idea que los norteamericanos, el imperio del mundo, estén al tanto de sus secretos, así como las cabezas principales, que son los británicos.

    Pero existe una "cabeza espiritual" aún mayor que es mucho más poderosa, y que si lo meditas bien, podrás darte cuenta. Si sigues esa línea entonces entenderás.

    Que lo yankis tengan el manuscrito, ¿puede causar extrañeza? Pero ni con todo su poder, tienen la clave de todo, te lo puedo afirmar!

    Un abrazo
    Debbie

    ResponderEliminar
  7. Leo entre líneas. Ya no digas más. Muchas gracias, Débora.


    Un fuerte abrazo.
    John.

    ResponderEliminar
  8. Cuando comencé a conocer más de este enigmático texto, observe algunos detalles interesantes de comentar. Uno de ellos es el casi nulo avance por decodificar linguisticamente el texo, creo yo que es debido a que estamos en frente de una lengua muerta prediluvio de la cual no tenemos información, lo que lo hace casi imposible de decodificar. Pero aún así existen algunos elementos como la repetición de caracteres que me hace pensar que podemos estar ante un texto escrito bajo un concepto metafórico, donde la repetición es un recurso fundamental para este tipo de construcciones y avanzando un poco más lejos podría incluso conformar un código sonoro o musical. (Al menos eso puedo observar con mi ojo de diseñador.

    Otro detalle radica en la la estructura de conjunto que tienen los estos "textos" Primero se observa que es conjunto de palabras o grupo de palabras forman párrafos, que están escritos de izquierda a derecha, esto se observa al observar letras capitales al comienzo de los mismos en el costado superior izquierdo de lagunas páginas y la deformación caligráfica (Se empequeñese) que experimentan los caracteres al llegar a los limites derechos, principalmente cuando se encuentran con un dibujo. Esto no da otro indicio de que el texto fue escrito por una persona que funcionaba bajo esta lógica moderna, lo que no quiere decir que el contenido fuese contemporáneo a su época, solo afirmar que el registro fue hecho bajo esas concepciones tecnológica lo que coincide con su datación. También es particularmente llamativo es que la caligrafía es bastante fluida, pues no hay vacilación en el trazado de los caracteres, he incluso podemos observar cierto carácter personal o estilo gráfico propio del copista. Estos características me hacen en un texto no hecho con fines fetichistas o de culto analizando su forma, no su contenido, sino más bien de un libro de registro.

    Otro aspecto interesante es observar la falta aparente de Títulos, lo que reafirma lo anteriormente expuesto, además de que a diferencia de algunos textos medievales o renacentistas clásicos este singular libro si podemos llamarlo así, posee una diagraman de párrafo un tanto llamativa, ya que no es en bloque o justificada, sino que se amolda a las ilustraciones o dibujos. Esto no es justamente porque dejaron el espacio exacto para el dibujo, sino porque se construyó al revés, primero se ilustró y luego se escribió. Utilizando esta forma de registro conseguimos resultados parecidos a los observables en este manuscrito, en cierta manera y guardando cualquier proporción es bastante parecido a los apuntes credos por Leonardo Da Vinci en épocas renacentistas, que por lo demás se parecían mucho con las láminas que debíamos diseñar en la escuela de Diseño cuando estudiaba en la universidad. A lo que apunto con esta observación es que posiblemente la lógica de registro obligaba a que el contenido Gráfico(sintaxis)se registrase primero, dándole a esta información visual prioridad en el orden de construcción.

    ResponderEliminar
  9. Para reafirmar esta última idea, también podemos observar una cantidad de detalles gráficos que a simple vista parecen burdos, pero a ojo de quien conoce el ambiente gráfico puede darse cuenta de la gran riqueza gráfica expuesta en esta obra, delatando de forma inequívoca una gran observación del dibujante. Sin embargo la obra sigue teniendo características de ser un registro de apuntes gráficos, pues se observa la falta de tiempo y dedicación para realizarlo de forma perfecta esto no porque quien hizo el registro no quisiera darle el tiempo, sino porque a mi entender en contexto que experimenta el copista o iluminador (dibujante) le demanda realizar su trabajo de forma rápida o apresurada. Esta falta de tiempo por ejemplo no la observamos en textos medievales realizados por monjes en monasterios donde vivían en función a este trabajo y donde el tiempo alcanzaba incluso para adornar minuciosamente todos las letras Capitales del texto. Aquí es todo lo contrario al parecer el tiempo no sobraba.


    Conclusiones: Básicamente creo de forma muy personal que este ejemplar (Manuscrito de Voynich) no es un libro original, pues como se abran dado cuanta hablo antes de copista, creo que es una "copia" y eso lo reafirma también el prologo al decir "que es una copia del Original", lo que me hace pensar que quien realiza este registro tuvo acceso a este original y lo hizo escaso de tiempo por algún motivo y por eso el proceso utilizado que antes he descrito, como si se tratase de apuntes.

    En cuanto al significado de las ilustraciones solo puedo concluir que existen algunos conceptos bastante relacionados y fáciles de comprender como lo son el ser humano, la tierra y el cosmos. La relación entre ellos y el propósito del manuscrito solo puede ser detallado cuando el código lingüístico pueda ser decodificado.

    Saludos Amigos, quería comentar breve, pero ya vez se me escapan las palabras cuando algo me parece interesante. Espero no haberlos aburrido y ojalá puedan mantenerme al tanto de cualquier información extra, mi correo es diseno.osd@gmail.com

    Un Abrazo Fraterno.

    ResponderEliminar