17 de diciembre de 2014

Enlil versus Yahvé - Cuestión de Odio - Débora Goldstern

Enlil versus Yahvé
Cuestión de Odio
Débora Goldstern



La cuestión Anunnakis sigue marcando la cancha a nivel misterio, como lo demuestra la cantidad de seguidores que hacen de la saga de Sitchin, un fenómeno sin parangón en la era virtual. 

En lo personal, mi visión sobre el trabajo de Sitchin encuentra respuesta negativa a sus reclamos históricos en la materia, nacida de su propia interpretación sobre lengua súmera, la cual no comparto.Esta realidad tiene a su máximo referente en el canal youtube, donde una serie de videos interminables dan cuenta de su poderío.

Aunque David Icke se convirtió en uno de los portavoces más conocidos, ganando popularidad por su tesis reptil, actualmente es David Parcerisa, divulgador español, quién parece llevar la batuta sobre el tema, consagrándolo como alto referente. Debido a una serie de mensajes remitidos, para que atendiera a Parcerisa y su trabajo, decidí tomarme la tarea de examinar su discurso, tomando como base una conferencia donde se trata la figura de Enlil, e influencia actual.

Luego de una larga introducción volviendo a repasar la saga sempiterna de Sitchin, Parcerisa, parece querer diferenciarse de su mentor, declarando que el perverso Enlil, enemigo de la humanidad, es el dios judío Yahvé, sutileza peligrosa por sus implicancias.

Recordemos que Sitchin era de religión judía, y en su saga el prototipo Yahvé cobra identidad con Enki, defensor de la humanidad.

A Parcerisa parece no preocuparle esta desviación, en su intento por situarse como la nueva luminaria en el campo Annunaki, estableciendo una línea divisora sobre el trabajo de Sitchin, del cual dice "inspirarse", pero no coincidir en todo. Su voz es nueva, "anuncia", se abre otra etapa.

Para desgracia de Parcerisa, ni su voz, trabajo y visión resultan novedosos, ya que la simpatía antisemita, tiene a Icke como su cabeza principal. El pueblo elegido es un "muñeco humano", parafraseando al gran Fabber Kaiser, llevado de las narices por el diabólico Enlil, sigue escupiendo en el audio.

Y es que la conspiranoica parece sustentarse en el "problema judío" como causa de todos los males, incluso protohistóricos, chivo expiatorio que en la actualidad alcanza mayor fervor.

"En la escuela era un cero en materia histórica", sigue comentando Parcerisa, y luego de lo escuchado, cuánto razón le doy!

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