Débora Goldstern descifra
el "Misterio Intraterrestre"
de La Cueva de los Tayos
Manuel Carballal - EL OJO CRÍTICO
Débora
Goldstern comenzó a colaborar en EOC en nuestro número 38. Con
un artículo monumental, que dividimos en dos partes debido a su profundidad y
extensión: “Tercer Reich o cuando los gigantes descendieron de los cielos” (EOC nº
38 y 39). A partir de ese momento, y hasta la actualidad (su último artículo lo
publicamos en EOC nº 79) tuvimos la inmensa fortuna de contar
con sus brillantes, meticulosas y generosas investigaciones en muchas
ocasiones, y cada uno de sus informes suponía una auténtica tesis sobre el tema
objeto de su estudio. Como todos nuestros lectores saben ya, para nosotros
Débora Goldstern es muy probablemente, la mejor investigadora sobre anomalías
del momento. Y cuando en Los Confidenciales de EOC nº 79
adelantábamos la noticia de la inminente publicación de su libro “Secretos
subterráneos de los mundos olvidados” (CoronaBorealis, 2016), muchos
compartieron nuestro júbilo, ya que todos intuíamos que se trataría de uno de
esos libros imprescindibles en nuestra biblioteca. Y no nos equivocamos. Hace
unos días pudimos comprar en Amazon, por fin, la obra de Goldstern.
Bibliotecaria y escritora, y responsable del magnífico blog http://cronicasubterranea.blogspot.com.es/
Débora
es una practicante del buceo extremo, sumergiéndose en océanos de datos, hasta
profundidades a las que no llegó ningún otro. En agnéa. A pulmón libre. Y
rescatando de esas profundidades, en cada nueva inmersión, tesoros en forma de
datos que comparte con todos nosotros. Exploradores, contactados, astronautas,
nazis, ocultistas, espeleólogos, aventureros, astroarqueólogos… A través de las
más de 400 páginas de “Secretos subterráneos de los mundos olvidados”
encontramos nombres familiares para todos los aficionados al mundo de las
anomalías: Juan Móricz, Andreas Faber Kaiser, Neil Armstrong, Salvador
Freixedo, Eric von Däniken… y todos los que de una forma u otra han tenido
relación con la cueva de Los Tayos y el mito del Mundo Subterráneo.
-Debby,
comencemos por el principio… Como nació tu interés por el mito del Mundo
Subterráneo.
Digamos que en mis estudios, el mundo
subterráneo surgía una y otra vez como factor vinculante sobre ciertas
historias investigadas. Aunque el tema siempre me resultó intrigante, tuvieron
que pasar muchos años, antes de comenzar a compenetrarme seriamente con el
llamado mundo interno. Mis viajes a los Andes a fines de los noventa, así como
cierta literatura simbólica, se erigieron como puentes consultantes. Sin embargo
entrado al milenio, 2004, es cuando realmente se inicia mi camino definitivo
encarnado en el enigma de Tayos.
-Dentro
de la mitología intraterrestre, la cueva de Los Tayos, en Ecuador, supone un
mundo aparte. Como resumirías el papel de Los Tayos en el submundo del mito de
la tierra hueca?
Cuando empiezo mi abordaje de Tayos,
paralelamente me centro en la cuestión de la Tierra Hueca, ya que ambos tópicos
parecían beber de un mismo tronco, teniendo en cuenta algunos de los registros
escudriñados. Es así que me embarco en la redacción de un extenso monográfico,
“Tierra Hueca, Madre de todas las Conspiraciones”, donde por primera vez me
sumerjo en la mitología tierra-huequista. Aquel trabajo me permitió detectar
las primeras alertas en cuanto a la bibliografía existente, donde generalmente
se cruzaban datos poco verificados, y generalmente inconexos, alimentando una
visión fantástica y poco realista, revelándose insuficiente como fuente
principal. Aunque la visión de una tierra hueca sonaba atractiva, y concitaba
atención por parte de muchos creyentes, la falta de evidencias más plausibles,
obligaban dejar de lado la excitante posibilidad acerca de un planeta hueco.
Más allá de este descarte, la existencia de un mundo subterráneo tenía en Tayos
un protagonista de excelencia, que si bien no encajaba en este paradigma sobre
una entrada a un mundo hueco, merecía igualmente atención por algunas anomalías
recogidas, fenómenos, un tanto inusuales, salpicando su intricada historia.
-Sin
ir más lejos, el mes pasado la revista Enigmas publicaba un extenso reportaje
sobre la última expedición a Los Tayos (Enigmas nº 242). Sin embargo, y como
ocurre últimamente, apenas se menciona a Juan Móricz, su “descubridor”. Quien
fue Móricz? -A nivel oficial Móricz llegó a codearse con las jefaturas del
Estado, tanto en Argentina como en Ecuador, en busca de apoyos para sus
expediciones. Por qué, con semejantes contactos, nunca pudo demostrar su
teorías sobre la Tierra Hueca, la tumba de Atahualpa, los esqueletos gigantes,
o la expansión de la humanidad desde Sudamérica? Acaso todas son
indemostrables?
Digamos
que para entender la omisión de Móricz como eje central de Tayos, debemos
remontarnos al desencuentro desencadenado con y Däniken, cuando la publicación
de El Oro de los Dioses. A ese entredicho, debemos sumar lo
ocurrido con la expedición del 76’, donde la visión anglosajona tomó control
definitivo, y actualmente imperante como eje mediático, ante los devaneos
surgidos entre sus máximos representantes. Sumado a eso, debemos extender la
negación hasta las décadas claves, 1968-1969, totalmente ausentes de cualquier
relato oficial sobre Tayos, y que incluso, salpican al papel argentino en la
cuestión, generalmente pasado por alto en cuanto a lo actualmente conocido.
Dentro de este escenario vedado, otro tema ausente en los discursos, tiene a la
figura de Móricz, como expediente X, que para muchos parece surgir de la nada
misma, carente de toda historia pasada. Es así que en mi libro, puse muchísima
energía tratando de desentrañar al esquivo Móricz, siguiendo las pistas de sus
actividades, donde su Hungría natal se revela como eje de importancia. Desde ya
que Móricz arriba a Sudamérica con una bagaje intelectual fuera de la común
para la época, y que desde el vamos plantea, la búsqueda de un mundo
subterráneo oculto en las entrañas de los Andes. Durante su estancia Argentina,
estos conocimientos, que como digo, escapaban a la media conocida, y tan solo
reducto de un pequeño círculo muy a fin a esas ideas, concitaron adhesión por
parte de personajes inesperados, especialmente del ámbito militar, que a pesar
de su formación conservadora, creían en los postulados de Móricz. De alguna manera
logró convencerlos de sus ideas en base a evidencias parciales, de sus
supuestos hallazgos e hipótesis esgrimidas, aunque contradicciones internas,
impidieron un avance mayor en cuanto a las reclamaciones pretendidas, tendiendo
un manto de sospecha que hasta la fecha persiste.
-En
tu libro descubrimos el papel de los mormones en la rocambolesca historia de
Los Tayos… En qué consistió? –
Para entender el acertijo mormón hay
que remontarse a Julio Goyén Aguado, protagonista destacado de la saga Tayos, y
que por aquel entonces, 1968, aún era miembro del culto de Joseph Smith. Es por
esta vía que Móricz se vincula con el culto norteamericano quiénes terminan por
financiar una expedición temprana a Tayos, alentados por el propio húngaro
después de hacerlos partícipes de sus hallazgos. No obstante esta jugada audaz
por parte de Móricz, llevada a cabo un año antes de su declaración oficial
certificando su descubrimiento, la expedición se abortó antes de tiempo,
derivada por desinteligencia entre sus miembros, desconfianza mutua, que a partir
de entonces sentó precedentes a futuro sobre cómo posicionarse con el tema.
-La
expedición de 1968, como la del 69, concluyó que el origen de la cueva era
natural. La expedición Euatoriano-Británica de 1976, en la que participó el
astronauta Neil Armstrong, solo encontró algunas cerámicas, concluyendo que los
Tayos no era un monumento arqueológico sino geológico… Porque ninguna de las
numerosas expediciones que han visitado Los Tayos han encontrado nada
sobrenatural ni extrahumano…?
La expedición del 68’ se ve teñida
por el entredicho mormón ya comentado, que finaliza de mala manera, así como la
del 69, cuyo material fotográfico, quizás uno de los más importantes de todas
las exploraciones, revela que no está todo dicho. En
cuanto a la incursión del 76’, por parte de científicos británicos y
ecuatorianos, las contradicciones están a la orden del día. Aunque el informe
oficial declaró la “naturalidad del complejo”, negándole su artificialidad, con
los años los discursos fueron variando, así como cierta liberación de material
donde claramente se evidencian construcciones anómalas, inexplicadas para los
geólogos británicos participantes. Acerca de escritura interna, se reportó
grafía cuneiforme por parte de un estudioso ecuatoriano, así como otro tipo de
escritura que doy a conocer en el libro, material derivado de una expedición
reservada.
Fenómenos paranormales, si fueron
detectados especialmente si se atienden los relatos de Julio Goyén Aguado y
Juan Móricz, así como de otros protagonistas, pero por el momento, entran en la
categoría de rumores a comprobar.
-Sin
embargo Julio Goyén Aguado asegura que vio la cámara secreta…
Uno
de los capítulos que se transcribe en mi libro, La Cámara Secreta de
los Antiguos, efectivamente repasa el extraño periplo de Julio Goyén
Aguado, quién en 1968, en paralelo a la frustrada expedición mormona, declaró
que Móricz le permitió contemplar su descubrimiento en situ. Aunque en vida
Goyén fue reacio a extenderse en esta experiencia, entregó referencias a medios
y parte de su círculo privado, sobre su incursión en la supuesta cámara
ecuatoriana, donde estarían alojados los tesoros tan buscados. Claro que este
discurso, se ve opacado por la falta de material más visible que acredite su
testimonio, los cuales mi investigación no encontró. Circula sí una filmación
del año 68’, donde se ve a Móricz y Goyén dirigiéndose a la cámara secreta,
aunque tampoco aporta demasiado. Este material fue liberado hace muy pocos año,
y constituye una evidencia interesante aunque no concluyente. Se puede buscar
en Youtube.
Uno
de los momentos más tensos del affaire Tayos es el desencuentro entre Moricz y
Däniken… ¿Quién engañó a quién en tu opinión?
El
affaire entre Móricz y Däniken, constituye uno de los momentos cumbres de todo
el entuerto Tayos, y que para ambos involucrados, supuso un antes y después.
Por muchos años quién más sufriera el escarnio a nivel público con el tema, fue
el escritor suizo, salpicado por las declaraciones de Móricz, adjurando de las
supuestas reclamaciones transcriptas en El Oro de los Dioses. En mi
libro, se devela la verdadera trastienda de este desencuentro que marcó a fuego
la saga Tayos. Puedo sí adelantar que tanto Móricz como Däniken, tuvieron
culpas compartidas, siendo la traición por parte del húngaro a sus compañeros
expedicionarios del 69’, entregando material fotográfico prohibido a Däniken,
así como una promesa incumplida por parte del mismo, en cuanto ayuda y dinero,
que marcó la ruptura definitiva.
Qué
papel juega Carlos Crespi Crocce en esta trama?
Crespi es junto a Móricz, uno de los
grandes protagonistas en el entramado Tayos. En mi libro dedico varios
capítulos a este sacerdote salesiano, exponiendo todos los sinsabores que debió
padecer desde la fundación de su polémico Museo en Cuenca. Especialmente repaso
las contradicciones de su propia orden y los operativos vaticanos, el accionar
de los estamentos gubernamentales ecuatorianos, su vinculación con Móricz, y
por ende el tesoro de Tayos. Una historia realmente importante que desarrollo
en su totalidad. Sin Crespi no existe Tayos.
Y
el Mayor Petronio Jaramillo Abarca?
Este es un actor interesante de la
denominada saga Tayos, que en los últimos años fue adquiriendo cierto
protagonismo. Su figura representa un puzzle controversial en cuanto a discurso
narrativo impulsado por cierto sector anglosajón, que busca situarlo como el
verdadero descubridor del tesoro Tayos. Dentro de este imaginario, Móricz sería
un fraude, y Jaramillo el hombre a escuchar. Sin embargo jamás logró probar sus
afirmaciones, ni impulsó un acta notarial, como si lo hizo Móricz. Remitiéndome
a uno de los primeros estudiosos que lo entrevistó, Pino Turolla, su relato
huele a narración fantástica. Un mentiroso patológico.
En
2007 tuviste la oportunidad de tocar con tus propias manos algunas de las
planchas supuestamente extraídas por Móricz y Goyén Aguado en Los Tayos… ¿Cómo
llegaste a ellas? Teniendo en cuenta que son la única prueba física de la
historia relatada por Móricz, han sido analizadas?
Me
remonto a 2004 cuando inició mi vinculación con Tayos. Fue en ese año que tomo
contacto con Guillermo Aguirre, por entonces poseedor de los Archivos Goyén, y
quién además se encontraba redactando una biografía más tarde publicada
como Lírico y Profundo, narrando la vida de este espeleólogo
argentino, que en vida fuera su amigo. Durante tres años colaboro con
Guillermo, quién se convierte en mi guía acerca del tema iniciándome en sus secretos.
Es debido a esta confianza que se me revela la existencia de este material, el
cual en su momento supone un cimbronazo a nivel personal. Más tarde y debido a
un pedido mío, es que se realiza una exposición pública, donde por primera vez
luego de cuarenta y dos años de estar oculta, una de esas piezas sale a luz.
Sin embargo a pesar de este hito aparente, jamás logré que la plancha lograra
ser analizada, esgrimiéndose un sin fin de obstrucciones, así como la duda
generada ante los grabados plasmados, remitiendo a lo observado en la colección
Crespi, que se decía “nada tenía que ver con lo descubierto por Móricz”. Estas
sospechas, y la falta de mayores datos, motivaron mi alejamiento de esta
sociedad primigenia. Quién fuera mi mentor jamás me perdonó.
Entre
8.000 y 10.000 libros de oro, miles de estatuas de oro de animales, Móricz
afirmaba que los tesoros de Los Tayos eran extraordinarios, pero parece que
nadie ha conseguido demostrar su existencia. Y para colmo en 1967 Móricz
publicó lo más parecido a un libro, aunque solo tenía 16 páginas. Cuál es el
mensaje que Móricz envió al mundo a través de su único “libro” publicado?
Ciertamente el hallazgo de Móricz
hasta la fecha continúa en sombras, y tan solo contamos con testimonios, como
los que recojo en mi libro, que sin embargo se revelan insuficientes al tratar
de resolver la cuestión. Ahora, si pensamos en tesoro de Móricz como parte de
la Colección Crespi, que creo tiene una vinculación, aunque algunos se empeñen
en negarlo, entonces podemos hallar algunas respuestas, no exentas de desazón
¿El descubrimiento de Móricz se reduce a esas piezas? Afrenta difícil de
aceptar. En cuanto El Origen Americano de Pueblos Europeos, su único trabajo
conocido, representa un aporte muy interesante, teniendo en cuenta la época en
que fuera publicado, así como las presiones que debió tolerar por su mensaje
pró americano. Móricz pensaba que los antiguos magiares húngaros, cuyas raíces
esquivas provocaban acalorados debates entre los intelectuales de su país,
vinculaba a los sumerios, siendo su cuna central Sudamérica, con base en
Ecuador. Aunque esta tesis actualmente es resistida, considero su pensamiento
muy audaz y revolucionario. Algunos podrán considerar este documento como
producto de una mente febril y algo alocada. Personalmente lo considero un
texto de avanzada, producto de la genialidad de Móricz.
-En
tu trabajo “Tierra Hueca, madre de todas las conspiraciones” (2008) concluyes
con gran escepticismo tu primer acercamiento a las teorías intraterrestres… Lo
mantienes?
En
mi mente, el monográfico donde desarrollé mis observaciones sobre esta teoría
tan controvertida, continúa sin alteraciones. A casi ocho años de aquella
investigaciones me sigo encontrando con los mismos datos, citándose los mismos
autores ya descartados, y con material fotográfico pululando por Internet, que
no resiste ningún análisis serio. Ni hablar de ciertos comunicadores, que
continúan manteniendo la llama tierrahuequista en base a las mismas ideas
remanidas. La creencia en un mundo hueco tiene vida para rato, mito
persistente, imposible luchar con tanta exposición. Ahora bien, una cosa es la
tierra hueca, y otro muy distinta la real búsqueda subterránea, donde entra a
tallar una línea un tanto más profunda, que denomino tradición primordial, tema
que va a desarrollar mi próximo libro. Igualmente esa necesidad se apega a un
requerimiento espiritual, intentando buscar algunas respuestas sobre “cierta
actividad” subterránea poco comprendida. Si a quemarropa Carballal me pregunta
¿creo en intraterrenos? le diría, tal vez, aunque no como los imaginados. Aviso
que aunque esta nueva apuesta tenga un sello más esotérico, no por eso voy
abandonar mis banderas inquisitivas, nadie se confunda. La alerta siempre
sigue.
-Tu
libro documenta de forma extraordinaria un viaje a la decepción. Pero en la
página 362 mencionas que has visto unas fotografías de la expedición de 1987
que te hicieron replantearte tu escepticismo… que fotos eran esas?
Digamos que el material del 87’,
resultado de una expedición privada la cual me confiara una testigo argentina,
logró darme una lucecita de esperanza en cuanto al enigma Móricz, aunque no
apaga todas mis dudas en cuanto el tema. Un hecho que si debo marcar, es que
esta documentación contiene una fotografía muy especial donde se aprecia una
entrada oculta y actualmente no declarada, hacia el complejo subterráneo de
Tayos, observándose un ranchito en el medio de la nada. Admito que al reparar
en la toma sufrí una pequeña conmoción, puesto la imagen me remitía a una
experiencia personal, conocida por muy pocas personas. Ocurrió que en 1998
mucho antes de iniciarme en los estudios subterráneos, soñé que visualizaba un
“ranchito solitario en el medio de las montañas”, vislumbrándose en su interior
una ciudad brillante. Qué un sueño y foto empaticen puede no significar nada,
fruto de la casualidad, o tal vez no. Los designios del “Rey del Mundo” son
insondables ja! Gajes del oficio, todo no se puede explicar. Perlitas de la
investigación.
Parece
claro que, pese a todo, Móricz mintió sobre muchos de sus supuestos
descubrimientos arqueológicos, y sin embargo, gracias a él, mucha gente ha
conocido Tayos, el mito del Mundo Subterráneo, etc… Deberíamos entender que su
aportación al conocimiento es similar a la de Lobsang Rampa, que aun siendo un
estafador, ayudó a miles de lectores a acercarse a los misterios del Tibet?
A diferencia de Cyril Hoskins, alias
Rampa, János Móricz Opoz documentó parte de sus correrías, especialmente si
pensamos en el Acta Notarial que en 1969 legó al gobierno ecuatoriano,
certificando su hallazgo. Por desgracia, a nivel comunicacional, su afición al
secretismo, así como propias dilaciones personales, encarnadas en
manipulaciones y contradicciones poco claras, llevaron a un callejón sin salida
con respecto a sus reclamaciones en Tayos. A pesar de mi mirada un tanto
escéptica con respecto a todo el tema, guardo cierta esperanza en que muchas
dudas encuentren luz a futuro, y espero que mi trabajo sea continuado. No me
creo la dueña de toda la verdad. Móricz fue un iniciado, aunque algunos y con
razón puedan pensar en una misión fallida y errática en algunos aspectos
¿Encontró algo “inusual en Tayos”, o tan solo se aprovechó de la ingenuidad del
momento? Quizás nunca lo sepamos, lo cierto es que su leyenda persiste y se le
debe reconocimiento en poner a discusión un mundo subterráneo aún en ciernes.
El tiempo juzgará.
Que opinan ustedes de aquellas fotos donde se veen algunas grandes piedras perfectamente lisas que quedaron en la Cueva de Los Tayos (come las de Sacsayhuaman en superficie)?
ResponderEliminarY porquè los Igleses llevaron a cabo una expedicion paralela y acompanados por (mercenarios) Gurkas allì??
Por ahora en cuanto a esas formaciones, los geólogos no se ponen de acuerdo, si aquellas piedras pulidas cuentan con factura humana en su realización. Y los ingleses y su cargamento gurka es una constante en ellos, antiguo resabio imperial y colonia. Cuando aquí en Argentina se desató la guerra de Malvinas, también vinieron a combatir con gurkas. Nada nuevo bajo el sol.
EliminarArmstrong, volvió luego de haber inicialmente declarado que no habia nada de extraño. El segundo viaje de Armstrong abandonó Ecuador llevando varias cajas selladas que nadie detuvo para inspección, aduciendo muestras minerales.
ResponderEliminarCrespi por su parte tuvo varias piezas de metal en exhibición, incluyendo hojas de metal de un libro. Hoy no hay un museo en Cuenca con esas piezas. Segun historias populares, las piezas fueron provistas a Crespi por "campesinos " bajo alguna condición altruista de uso.
Hasta donde investigué y está publicado en mi libro, Armstrong, estuvo horas en la cueva, no fue tan relevante su visita e importancia en los eventos posteriores. Sobre lo ocurrido con el tesoro de Crespi en mi libro se cuenta bien, te voy a dejar un artículo, donde cuento un poco esa historia. Y en cuanto a lo retirado de la cueva, solo un dato, si es cierto porque el líder de la expedición Stan Hall se quedó a vivir en Ecuador? Ahí un enigma con respecto a tu inquietud, si se llevaron o no algo de importancia en la expedición del 76'. http://cronicasubterranea.blogspot.com.ar/2016/06/coleccion-crespi-y-la-civilizacion.html
ResponderEliminarNo es necesario ser tan miope y poner un poco de logica y de mente abierta para deducir que el fenomeno de la vida esta contenido de una y mil formas en todo el universo ya sea intra o extra. Somos tan "reducidos" a apegarnos a una "verdad" que se construye bajo parámetros limitados y a veces espurios creados por nuestros modelos cimentados en el egoísmo, secretismo y poder.
EliminarGarcias Fabio por tu aporte. Debbie
ResponderEliminarTodo lo oculto va a salir a la luz del día... es cuestión de tiempo. El mismo egoísmo de unos cuantos lo ha retrasado. Todos quieren dinero, fama o fortuna por sus hallazgos... Mientras esto siga sucediendo... solo estaremos colaborando con el dios de la oscuridad y la ignorancia...
ResponderEliminarConcuerdo Joaquín. Si lees mi libro te vas a dar cuenta cuanto de esa ignorancia está presente, y el egoísmo sobre todo. Saludos Debbie
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