23 de julio de 2018

La Vida Secreta de Carlos Castañeda - Manuel Carballal - Entrevista Exclusiva - Débora Goldstern


La Vida Secreta de Carlos Castañeda
Manuel Carballal
Entrevista Exclusiva
Débora Goldstern©



Con La Vida Secreta de Carlos Castañeda, Manuel Carballal se consagra como un biógrafo de primer orden, a través de una trabajo de investigación monumental, y de fuerte sello detectivesco, que publicado recientemente con prólogo de Javier Sierra, ya está alcanzando gran repercusión mediática, gracias a como decimos, profundización pocas veces vista acerca de la vida del enigmático Castañeda, que aún hoy día continúa siendo un gran desconocido.

A través de ésta entrevista exclusiva, que por primera vez trae a Manuel Carballal a las páginas de Crónica Subterránea, cumplimos también anhelo de vieja data, con quién a mi entender es uno de los grandes estudiosos españoles, uniéndeme en lo personal vínculo profundo, por ser éste autor padrino de lujo, en los inicios de mi carrera allá por los noventa.

Atienda el lector!

Esta biografía que hoy ve la luz La Vida Secreta de Carlos Castañeda: antropólogo, brujo, espía, profeta, que como escribiste: “es el resultado de cinco largos años de extensa y ardua investigación”, me lleva hacerte la primera pregunta, puesto teniendo en cuenta a lo largo del tiempo te viste envuelto en la pesquisa de tantos misterios ¿Qué tiene este caso, a diferencia de otros, que capturó tu interés de forma tan profunda?
-Yo leí sus libros siendo un adolescente, y me marcaron. Como otros.  Investigué el chamanismo desde Siberia a Haití, pasando por Senegal, Cuba, Mauritania o Guatemala influenciado por sus libros. Pero en 1994 tuve la oportunidad de conocer personalmente a Castañeda y sus brujas, gracias a Concha Labarta, redactora-jefe de la revista Más Allá y líder del grupo de Castañeda en España. Poco después de su prematura muerte Chris Aubeck me envió un artículo muy duro sobre Castañeda para El Ojo Crítico (www.elojocritico.info).  Yo me sentí agredido por aquel artículo, porque significaba que mi amiga Concha había perdido los últimos años de su vida siguiendo un engaño. Y aunque decidí publicarlo, porque Aubeck citaba todas sus fuentes y era legítimas, decidí que no pararía hasta saber toda la verdad sobre Carlos Castañeda. Y tardé cinco años y hasta el último céntimo de mis ahorros en conseguirlo.

La carrera de Castañeda como autor tiene desde sus inicios un éxito fenomenal, coronando Las Enseñanzas de Don Juan, 1968, como uno de las obras fundamentales de la llamada contracultura de los sesenta, y best seller de primero orden ¿Podrías sintetizar cómo se gestó este libro, que en su momento causara tanto revuelo?
-Es difícil comprender como ocurrió todo sin contextualizarlo en la biografía de Castañeda. Solo cuando sabes cómo se produjeron los hechos puedes entenderlo todo. Digamos que Castañeda tenía muchos conocimientos sobre brujería antes de matricularse en la facultad de antropología de UCLA, el 19 de junio de 1959 (esto me lo confirmaron en la secretaría de UCLA). Acababa de abandonar la carrera de psicología en LACC por un desencuentro con un profesor racista. En UCLA su profesor de antropología californiana, C. Meighan pidió a los alumnos un trabajo para ese semestre, entrevistando a un  indígena. Solo 3 alumnos lo presentaron, pero el de Castañeda destacaba por encima de todos. Era una obra de arte, y Meighan le propuso que lo alargase para convertirlo en un libro. Se trataba de “Las enseñanzas de don Juan”.  Para comprender su éxito, y la mezquindad de UCLA, solo hay que recordar que durante los 60 la revolución psicodélica de Thimoty Leary introdujo a millones de jóvenes americanos en el consumo del LSD como un atajo a experiencias supuestamente místicas. Pero justo en 1967 y justo en el Estado de California, se prohibió por primera vez su uso, porque se publicaron los primeros estudios clínicos alertando de sus efectos secundarios, y de los primeros suicidios durante su consumo. Y en ese momento, cuando a los jóvenes americanos les quitan su pasaporte a la iluminación rápida, aparece un estudiante de antropología anunciando que existía otro camino: las plantas de poder chamánicas. UCLA sabía que el libro de Castañeda iba a arrasar y por eso lo apoyaron sin contrastar sus fuentes.  Pero fue mucho más que eso. Cambió el mundo.

Digamos que desde 1968 hasta 1972 Castañeda parece proyectar una imagen de autor soñado, ganando adeptos en todos los campos, ya sea como público seguidor, así como también del área profesional y científica. Sin embargo esta aura de respetabilidad, va a sufrir el primer cimbronazo cuando en 1973 la Revista Time, da a publicidad un reportaje controvertido, poniendo el acento en algunos puntos oscuros de su biografía. Y te consulto, si este episodio supone una ruptura en la vida de Castañeda, ¿o es que su repentina fobia mediática, responde a cuestiones más profundas?
-Durante sus primeros años en EEUU, y como muchos otros inmigrantes  latinoamericanos, Castañeda se buscó la vida haciendo pequeños trabajos (taxista, cocinero, vendedor, etc.) que años después nos contaría que había realizado por orden de don Juan para luchar contra su ego. Esto me lo confirmaron sus compañeros de piso en aquella época.  A todos les contaba que venía de una familia noble brasileña, y que se había educado en Argentina e Italia.  Pero no como una maniobra bruja para borrar su historia personal (esto  ya lo hacía en 1951, cuando llegó a EEUU y en sus libros dice que conoció a don Juan en 1960). No, la razón era mucho más prosaica. Había dejado embarazada a una compañera de la Escuela de Arte de Lima, y esa es la razón fundamental de su salida del país. Su única hija biológica se llama Rosario y ahora vive en Suiza. Cuando, en 1968 se convierte en millonario con su primer libro, impartía conferencias, concedía entrevistas en radio, etc. Yo he localizado varias de esas grabaciones. Pero cuando Time investiga su verdadera biografía, aunque un poco superficialmente, y localiza a su familia en Lima, Castañeda sabe que su mayor secreto, la hija y la primera esposa que podrían tener derecho a parte de su fortuna,  también podrían ser descubiertas por los periodistas y es entonces cuando radicaliza su anonimato.

Hablemos de Don Juan Mathus. Cuando Castañeda presenta su historia iniciática sobre este instructor nahual, el chamanismo andino se ve sacudido por esta poderosa narrativa, experimentando un renacimiento notable. De pronto conocer a Don Juan Mathus se vuelve indispensable, y vemos a miles de buscadores espirituales empeñados en localizarlo, sin acertar nunca su paradero. La confusión se hará mayor cuando en 1996, la explosiva biografía de Margaret Runyan, Un Viaje Mágico con Carlos Castañeda, ponga en duda la existencia del enigmático chamán. Y te pregunto ¿Qué revela tu investigación sobre la identidad de Don Juan Mathus?
-Todo. Cuando, como y a través de quién conoció Castañeda a “sus” don Juan. Como él asegura, ocurrió en verano de 1960, y a través de un, en realidad una, compañera de UCLA.  Castañeda estaba preparando su trabajo para la clase de Meighan y comenzó una relación con Mary Joan Backer, la nueva bibliotecaria de UCLA, que fue quien le presentó al chamán oso Salvador López.  Si Castañeda ocultó la identidad de López y de la persona que se lo presentó, fue porque hacía unos meses que se había casado con Margaret Runyan, y no quería darle explicaciones a su esposa sobre sus escapadas a la reserva cahuila con su amante,  a la que años después presentaba como la primera discípula de don Juan… ahora ya entiendo porque decía eso. Pero López no fue don Juan. No el único. También están Tata Cachora,  José Matsuwa, Ramón Medina, etc.  Ahora se de quien y como sale cada una de las enseñanzas de don Juan, es un puzle. Pero lo más importante es que cuando aparece Michael Korda, y  la editorial S&S compra los derechos,  no se conforman con el brutal éxito comercial del primer libro de Castañeda, quieren más.  El primer objetivo de Castañeda era conseguir un doctorado, para sentirse respetado, y aunque en sus primeros libros siempre insiste en que su aprendizaje llegó a su fin y no tiene más que contar, terminaba cayendo ante la tentación millonaria de Korda, y escribía un nuevo libro. Para lo que necesitaba más fuentes. Y buscó otros “don Juan”.  chamanes y chamanes auténticos que le dieron los ingredientes para construir los personajes masculinos de la saga: Salvador López, Tata Cachora, Ramón Medina, José Ríos, Pachita, María Sabina,  Elsie Parish, doña Hortensia, Guadalupe de la Cruz, o a otros como Andrés Segura, Magdalena Ortiz, Milosh Trnka, Soledad Ruiz, Marcelo Ocaña, Zuleica, Eduardo Calderón Palomino, etc. En el libro pongo cara y nombre a todos ellos.

Uno de los enigmas que más controversia alimenta el debate sobre Castañeda, tiene a sus orígenes pasados, previos a su posterior residencia norteamericana, como eje de esta discusión. Son muchas las lagunas informativas sobre este punto, y de resolución no siempre feliz para alguno de sus biógrafos. En tu caso ¿cómo te las arreglaste para llevar a buen puerto esta reconstrucción tan difícil, donde muchos fracasaron en su intento por resolver este acertijo?
-Hice lo mismo que Time. Acudí a los archivos de UCLA y de ahí hacia atrás. Consulté los archivos  de inmigración y allí me facilitaron hasta el listado de pasajeros del S.S.Yavari, en el que entró en EEUU. Después solo hubo que seguir la pista hacia atrás. Localizar a sus compañeros de la Escuela de Arte en Lima, o del colegio San Ramón fue relativamente sencillo. Como encontrar sus notas escolares en los archivos, su registro de bautismo, su partida de nacimiento, y  cientos de documentos similares. Lo difícil fue poder entrevistar a su hermana Lucy, su último familiar directo vivo. Está muy protegida por sus hijas que no me permitían llegar a ella. Así que me salté una generación y lo intenté a través de sus nietos. Todos  decidieron no ayudarme… menos uno. Y a él debo agradecer haber podido acceder al testimonio de la hermana de Castañeda, que fue esencial para poder comprender todo lo que ocurrió.

Quizás uno de los pasajes que más asombran de tu fantástica investigación, es que a diferencia de otros estudiosos, pudiste conocer a Castañeda en persona, llegando a participar en su círculo interno. Contanos como llega Manuel Carballal a realizar esta proeza, teniendo en cuento lo esquivo de este personaje.
-Puedo contarte que Javier Sierra y yo éramos muy amigos de Concha Labarta, la representante oficiosa de Castañeda en España y que en 1994, durante una de sus visitas a mi país, Concha nos invitó a asistir a una reunión privada con él.  Lo que ya no puedo explicarte, porque para mí es incomprensible, es porque sus brujas –que se paseaban entre nosotros supuestamente buscando “brujos potenciales”- se fijaron en mí y le insistieron a Concha en que yo siguiese las enseñanzas de Castañeda de una forma absolutamente atípica.  Los aspirantes a guerreros pagaban fortunas por acceder a los “pases mágicos”, lo que ahora llaman Tensegridad, y sin embargo en mi caso, y por indicación de Carol Tiggs y Kylie Lundagh, dos de sus brujas acudieron a mi casa en Galicia y me enseñaron los “pases mágicos” en privado. Este es un privilegio absolutamente anómalo en el mundo de Castañeda.

Protagonista clave que aparece mencionado en un capítulo de tu libro, es Andrija Puharich,  extraordinario estudioso de lo paranormal,  y quién además fuera el encargado de  popularizar a nivel mundial, la figura del famoso dotado israelí Uri Geller. En 1959 escribió, The Sacred Mushroom, narrando sus experiencias con los hongos alucinógenos, y que incluso le valiera el reconocimiento del mismísimo Aldous Huxley ¿Podemos decir este trabajo resulta vinculativo como influencia referencial, en la obra posterior de Castañeda?
-Por supuesto. Es una de ellas. La segunda esposa de Castañeda recuerda que llegó a obsesionarse con “The Sacred Mushroom” aunque, con todo lo que se hoy, estoy seguro de que le conmocionaron más la intervenciones   de Puharich en documentales y series de TV americana de los 50, como Perry Mason. Según me explicó Uri Geller, el conoció a Castañeda, y mantuvo una buena relación con él durante años, porque se lo presento Andrija Puharich. Aunque por desgracia, según me contó el hijo de Puharich, la casa de su padre sufrió un incendio –supuestamente a manos de la CIA- y los archivos del genial científico, y por tanto las pruebas de su relación con Castañeda, se quemaron cuando amenazó a la CIA de desvelar los detalles de su colaboración con el espionaje americano.

Con el fallecimiento de Castañeda su legado se ve en entredicho, antes las terribles revelaciones que empiezan a filtrarse, donde se erige un lado oscuro siniestro, y muy alejado del líder carismático por todos conocidos. Denuncias y acusaciones de graves delitos ejercidos, en contra de sus seguidores más devotos, que hacen hoy día preguntarse, porque se tardó tanto tiempo en darse a luz esta terrible verdad. Entiendo tu libro destapa por primera vez estos hechos tabúes, y poco conocidos ¿Es así
-Yo no hago valoraciones morales, ni soy nadie para decir si fue siniestro o no. Eso le toca al lector. Yo solo ofrezco los hechos históricos. Los documentos oficiales. La verdad contrastada.  Por supuesto el desenlace de la historia de Castañeda es dramático. Hace unos días el hermano pequeño de Florinda Donner, la preferida de sus brujas y su cuarta esposa, me daba las gracias porque decía que solo ahora entendía porque su hermana se quitó la vida tras la muerte de Castañeda…. Como las otras.  Pero esta respuesta, expresada así, sin comprender como llegaron “las brujas” al mundo de Castañeda, y como algunas de ellas fueron cómplices,  puede parecer increíble. Te doy mi palabra que una vez contextualizados históricamente cada uno de los personajes, todo adquiere sentido y, lo que es más importante, entendemos que no podía haber existido otro desenlace… Pero también podemos señalar a los directos responsables de los dramáticos acontecimientos de 1998.

Teniendo en cuenta la obra de Castañeda, sigue causando gran impacto dentro del imaginario popular, ¿cómo evalúas de aquí a futuro su legado, y si pensás tu investigación supone, un nuevo inicio en la forma de abordar a este escritor?

No. Castañeda es un mito.  Es el fundador de una nueva religión: el neonahualismo tolteca, seguida por millones de personas en todo el mundo. Y como en el caso de los fundadores de cualquier religión, no importa lo que diga nadie. El mito siempre permanece. Y en este caso con el agravante de que el ambiente académico y universitario lo respaldó. Y para los académicos y  para el macronegocio editorial –Castañeda vendió 27 millones de libros en 17 idiomas- es inviable retractarse. El mito vende más.  Y yo no soy nadie. De mi libro se han impreso poco más de un centenar de ejemplares  y solo en español. Es imposible intentar competir con las grandes editoriales, a las que dirijo críticas muy duras. Pero al menos ahora la información está disponible para quien desee conocer la verdad. A mí me costó cinco años y seguir la pista de Castañeda en EEUU, Perú, Costa Rica, Venezuela, España, etc.  El que ahora decida creer en las enseñanzas de Juan Matus, al menos ahora tendrá la oportunidad de escoger. Mi amiga Concha Labarta no tuvo esa oportunidad.

Luego de realizar esta biografía monumental, ¿qué otros desafíos aguardan a Manuel Carballal?
-La lista es inmensa. Queda tanto por hacer….  Ahora tenemos más información que nunca antes en la historia de las anomalías, pero también más desinformación. Y la tarea más urgente es separar el trigo de la cizaña. Es inviable llegar a conclusiones acertadas sobre los OVNIs, lo paranormal, el chamanismo, etc., si manejamos fuentes viciadas o abiertamente fraudulentas. Y si nuestro objetivo es descubrir la Verdad, tenemos que extraerla del  montón de basura que la oculta.  Ese es el objetivo de El Ojo Crítico, esta revista gratuita que el pasado diciembre cumplió 25 años de vida, y que en unos días sacará su número 87/88, con más de cien páginas y  la desmitificación de 3 grandes pesos pesados del misterio. Yo creo que ese es el camino, y para los próximos números ya estamos trabajando en varias investigaciones similares.


Manuel Carballal
Infinitas Gracias!
Débora Goldstern

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